Realidad Virtual, una herramienta terapéutica para gente de edad avanzada

Innumerables veces la tecnología ha sido una gran aliada para la salud y el bienestar de las personas de edad avanzada y la realidad virtual no ha sido la excepción.

Estudios recientes y nuevos experimentos en el campo de la geriatría han demostrado que la realidad virtual puede ayudar a la gente mayor a sentirse menos sola, a incrementar su sensación de bienestar e incluso beneficiar a los que padecen de Alzheimer o demencia.

Una de las formas de mejorar la vida de las personas mayores (especialmente aquellas que viven en residencias o están hospitalizadas) a través de la realidad virtual consiste en proporcionarles experiencias que serían inaccesibles para ellos en la vida real debido a su salud o limitada movilidad física.

Por ejemplo, viajes a lugares que alguna vez soñaron visitar, paseos en la naturaleza y experiencias como nadar con delfines o lanzarse de paracaídas. También la realidad virtual se ha utilizado en lo que se conoce como “terapia de recuerdo”, la cual busca estimular la mente de personas con problemas memoria a través de música, fotos y objetos familiares de su pasado.

Se ha observado que estas terapias mejoran el humor, estimulan la actividad cerebral y ayudan a las personas a fortalecer sus vínculos sociales a través de experiencias compartidas. Esto último es esencial para promover la socialización entre los adultos mayores, ya que ayuda a crear un sentimiento de pertenencia que reduce la sensación de soledad que es común en la gente mayor.

También se está utilizando la realidad virtual para complementar las terapias convencionales y para el manejo del dolor. En 2017 Cedars-Sinai realizó un estudio en el cual 50 pacientes hospitalizados recibieron terapia de realidad virtual donde visualizaron escenarios relajantes de la naturaleza, paseos en helicóptero y experiencias como nadar con ballenas en el océano. Los participantes registraron una caída del 24% en la escala de dolor después de la experiencia.

Realidad virtual para tratar la demencia

Por otro lado, estudios también han revelado que la realidad virtual puede contribuir al tratamiento de la demencia, la cual se estima que afectará a más de 130 millones de personas a nivel mundial para el año 2050.

Un estudio realizado por la universidad de Universidad de Kent, Reino Unido encontró que exponer a las personas que padecen de demencia a experiencias de realidad virtual les devolvía recuerdos antiguos, reducía la agresión y mejoraba sus interacciones con los cuidadores. En el mismo, participaron ocho pacientes de entre 41 y 88 años con distintos tipos de demencia, incluyendo Alzheimer y Huntington.

Los investigadores encontraron que los nuevos estímulos ayudaban a los pacientes a recordar viajes o experiencias vividas mucho tiempo atrás al ver lugares y objetos que de alguna manera les recordaba su experiencia.

Jim Ang, profesor titular de la Universidad de Kent y uno de los investigadores que condujo el estudio, señaló que la realidad virtual “aún se encuentra en su etapa inicial”, pero que “cada vez se realizan más investigaciones”, y que es necesario entender su impacto a largo plazo y sus posibles efecto secundarios”.

Desde el año pasado, en países como Singapur, por ejemplo, la Asociación de la Enfermedad de Alzheimer comenzó a incluir el uso de realidad virtual como parte de la terapia para quienes padecen de Alzheimer. Este tipo de sesiones estimula la mente y por ello se considera como una forma de fisioterapia.

Además, cuidadores y personas sin la condición también podrán aprender y entender mejor sobre los problemas que enfrentan las personas con demencia a través de talleres de realidad virtual y entrenamientos que incluyen estas tecnologías.

Referencias:

Tashjian VC, Mosadeghi S, Howard AR, Lopez M, Dupuy T, Reid M, Martinez B, Ahmed S, Dailey F, Robbins K, Rosen B, Fuller G, Danovitch I, IsHak W, Spiegel Bç (2017) Virtual Reality for Management of Pain in Hospitalized Patients: Results of a Controlled Trial

Tabbaa L, Ang CS, Rose V et al (2017). Bring the Outside In: Providing Accessible Experiences Through VR for People with Dementia in Locked Psychiatric Hospitals